Hay veces que el mundo que tenemos en nuestra cabeza es mucho mucho más grande que el real, donde vivimos. La realidad que vivimos se nos queda corta en cuanto a los sueños que tenemos. Creo que hemos llegado a un punto en el que estamos en el puerto, frente al mar de dudas y opciones, parados, quietos, mirando pensando en que hacer o que no hacer, que camino tomar... te sientes plástico, de gelatina, blando por que no sabes QUÉ hacer. Simplemente te quedas parado viendo como se baten las olas de conflictos y decisiones.
Yo personalmente siempre que me encuentro en este punto me es muy difícil llegar a una idea clara y concisa de que camino tomar, si lanzarse al agua o quedarse mirando pasando el tiempo y el tiempo... Leí que hay muchas veces en las que es importante retroceder para poder avanzar, muchas veces he aplicado esto y la verdad es que ha funcionado muy bien... no se, creo que esa puede ser la clave y la respuesta a estas situaciones.
Puedo decir que estoy en una capa un poco más superficial del mundo de mi mente ahora mismo, en la que puedo ver la luz a través de la fina estela que separa la realidad y los sueños....
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